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lunes, 10 de febrero de 2014

Invierno. Hojas caducas que quieren ser perennes

Invieno es la última estación de nuestro viaje en el año.
Un recorrido lento y frío, perezoso y extraño.

En esta época del año estamos más recogidos, como si nos lo pensáramos más para apartarnos del calor del hogar. Al salir volvemos a entrar porque hemos olvidado la bufanda y los guantes. Y ese gorro, que parece que no, pero se nota.

En otoño hablaba de pereza. Invierno es más bien reposo. Lástima que unos por otros no nos permitimos parar. Sea la estación que sea, hemos de adaptarnos. Porque hay tareas que son imprescindibles todo el año. Quizá invierno cueste algo más, pero entre otras motivaciones está que nos acercamos a la primavera. Sale algun dia el sol, nos molesta la bufanda y al día siguiente no salimos con ella. Y al otro nos resfriamos.

Así que muchas cosas que rodean al invierno invitan a quedarse en casa. Volver a leer aquel libro estando rebozado en una manta. Mirar fotos de cuando éramos niños. Preparar un bizcocho y merendar un tazón de chocolate caliente. En casa.
 
Todavía quedan algunas hojas en los árboles. Están marchitas y por mucho viento que haga esta tarde, miro de vez en cuando por la ventana y ahi siguen. Resistiendo a su condición de caducas.

Quizá no somos tan distintas de esas hojas que quieren ser  perennes, nacidas de árboles caducos. No nos rendimos al frío viento aunque estemos débiles porque nuestro árbol se ha dormido. Seguimos con él esperando la primavera, esperando los brotes de una mejor época. Porque quién sabe la suerte que habrán corrido las otras hojas que un buen día se soltaron de su árbol.

Enlace a la imagen:
http://blogs.elcorreogallego.es/el-gato-con-chanclas/2011/12/20/una-hoja-en-la-ventana/

12 comentarios:

  1. Estar muerto y aferrarse a la vida es una utopía. Prefiero ser hoja verde y radiante y cuando ya este seca corretear donde el aire me lleve, dejando mi lugar para otra en la primavera. Que delicia tomar un chocolate caliente mientras oyes repiquetear las gotas en los cristales. En todas las estaciones de la vida hay que disfrutar los pequeños momentos.

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    1. Estoy de acuerdo contigo. Disfrutar de todo lo que hay y saber apreciarlo, pero no forzar algo cuando ya no es posible. Creo que cuando se disfruta de un pequeño momento, deja de ser pequeño, verdad?
      Un abrazo Marcos

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  2. Yo en invierno lo que quiero es meterme en cama y no salir, pero qué a gustito que se está. Biquiños!

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    1. Ojalá pudiéramos estar todo el día enrollados en la batamanta sin nada más que hacer que leer y escuchar música o ver una peli.
      Aaaayyyy

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  3. A mí el invierno me "mustia" mucho. A ver si viene ya la primavera y florezco cual margarita. Jajaja. Besotes!!

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    1. A mí también me mustia. Tengo que esforzarme más para conseguir hacerlo todo. Pero hay días que se pasan volando y no han sido nada productivos. Bueno, productivos según se mire jejeje
      Besitos!

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  4. Es que yo al contrario que Álter adoro el otoño y el invierno. Me gusta ese recogimiento, la mantita en el sofá, el calor en el hogar, salir abrigada en esos días fríos con sol...Me gusta mucho. La primavera también pero dura muy poco, y es llegar el calor y la que me "mustio" soy yo, no lo soporto, me agota, me agobia y me pone de mal humor.
    Para comentar sobre tu alegoría de hoja perenne o caduca, aunque es muy bonita y da mucho juego, lo siento chica, hoy no estoy nada abstracta jaja.
    Besos

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    1. Invierno es lo que tiene, que abrigadito se está muy bien. Además, lo veo como más elegante. Da más juego el vestuario. En verano si por mí fuera iría todo el día en bañador para darme un chapuzón de vez en cuando aunque fuera en la pila de la cocina. Pero todas las estaciones tienen su rollo. Este año he escrito sobre cada una. Las puedes encontrar etiquetadas con sus respectivos nombres.

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  5. Precisamente ayer hicimos en casa lo que describes en uno de tus párrafos, mis hijas sacaron viejos álbumes de fotos, de su madre de joven y de ellas mismas de niñas, la verdad fue una buena tarde.

    Personalmente, me pasa como a Inma, me gusta mucho el otoño y prefiero el invierno al verano, podría vivir prefectamente con las otras tres estaciones.

    La vida puede compararse a la hoja de un árbol, porque brota, crece, vive y muere, pero nunca al árbol, que vive con dignidad sus numerosos cambios, su esplendor y belleza y cada año su decadencia para volver a surgir. Nos tocó ser humanos.

    Besos apretos, Cecilia, me ha gustado tu visión del invierno.

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    1. Entiendo lo que dices del verano porque tú vives más al sur que yo, si no me equivoco. Y anda que por allá no hace calóooo. Fui en agosto a Sevilla y fue poner un pie fuera del aeropuerto y hacía un viento que casi era como si se hubiera abierto la puerta de un horno gigante.
      Gracias Yeste. Tus comentarios siempre enriquecen mis publicaciones.

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  6. Me encanta este post porque se puede interpretar de varias maneras. Yo lo entiendo como un canto al afán de superación, a la supervivencia, a la valentía. Quizás lo veo así por el momento personal que estoy viviendo, a lo mejor en otro momento lo interpretaría de otro modo. Pero de todas formas me hiciste reflexionar :) Un beso!

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    1. Es lo que tienen las alegorías, que se pueden interpretar de muchas maneras. Pero sobre todo sirven para eso, para reflexionar! Me alegro de haberlo conseguido.
      Un beso

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