Cuenta una leyenda que Peter Pan es un jóven que vive en el país de Nunca Jamás y allí se lleva con él a los niños que no quieren crecer. Son "los niños perdidos". Estos niños se negaban a crecer. Preferían seguir jugando todo el día, fantasear que eran exploradores, piratas, guerreros o grandes héroes y, viviendo en Nunca Jamás, consiguieron detener el tiempo y ser siempre niños.
Garfio es un capitán de un barco pirata que quiere eliminar a Peter Pan. Se llama así porque en lugar de su mano izquierda tiene un garfio, porque Peter Pan se la cortó y se la echó a comer a un cocodrilo, con tan mala pata que el cocodrilo le persigue allá adonde va. Suerte que también se comió un reloj y con su tic tac, se le oye venir.
Este cuento ha sido usado en psicología para describir el "Síndrome de Peter Pan". Las personas que tienen este síndrome no quieren crecer, como les pasa a Wendy y sus hermanos, los protagonistas de esta adaptación de Disney. Pero Wendy, la más mayor, pronto se da cuenta que siendo niña para siempre tampoco es tan bueno como parecía.
Reflexionando sobre este tema, he llegado a la conclusión de que muchas personas todavía siguen jugando, como los niños perdidos, intentando hacer como que no pasa el tiempo. Qué magnífico es sentir que no pasa el tiempo, que todavía somos jóvenes. Quedarse en esta etapa para siempre en la que nuestra mayor preocupación sea por qué se cuelga internet o qué haremos el sábado. Pero el país de Nunca Jamás no existe, aunque creamos vivir en él.
Y la pregunta es ¿hasta cuándo podremos parar el tiempo? ¿Hasta que se acabe la crisis?
Últimamente he estado pensando en el capitán Garfio. Este pirata que huye del cocodrilo y su tic tac. Te invito a que hagas clic sobre el cuadro siguiente para que conozcas su historia:
Pienso que los Peter Pan no quieren crecer porque tienen miedo. Miedo al futuro, a un futuro incierto, y más en esta época. Muchos ni siquiera fantasean en algo concreto y me entristece pensar en ellos como si no fueran ni siquiera niños. Pero los niños grandes que sí tenemos una fantasía, ¿ por qué nos cuesta hacerla realidad? Es fácil encontrar excusas para no lanzarse y también suena fácil de decir eso de que "tú puedes hacerlo" o "todo saldrá bien", así que no lo diré. Pero el reloj, este mismo que tengo delante de mí en este momento, no deja de hacer tic tac, como el cocodrilo que perseguía al capitán Garfio.
Como conclusión, la vida de Peter Pan no es más que fantasía. La vida no puede ser así para siempre. No imagines en ser explorador, pirata, guerrero o un héroe ¡lucha por conseguirlo! Por lo tanto, no sé si lo podré hacer realidad, no sé si me saldrá bien, pero lo intentaré por más ventajas que inconvenientes, por mi vida y por ir al compás del tic tac, como el gracioso cocodrilo, mi verdadero héroe de esta historia, que no ceja en su empeño de conseguir lo que quiere.
Un abrazo.
Referencias:
Viendo la vida pasar
Vídeo: El capitán Garfio y el cocodrilo "Tic tac"
quisiera saber que es el Sindrome de Garfio.
ResponderEliminarPeter pan no es un heore como todos piensan el es el culpable de la espantos vida del capitan por lo que le hizo
ResponderEliminarNo le basto con cortarle la mano se la dió al cocodrilo y el pobre capita sufre por eso no veo nada heroico en eso
ResponderEliminarNo se hasta que punto es malo el capitan es logico que odie a Peter pan
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